Una de mis aficiones favoritas es conversar. De siempre he sido muy habladora. No me acuerdo la edad con la que empecé a hablar, pero seguro que fue bastante pronto. Desde entonces no he parado. :)
De hecho, mi afición por hablar me ha costado algún disgustillo en la vida: ya sabéis, en el cole me han castigado más de una vez por hablar mucho. También me he creado alguna fama entre la gente de ser demasiado habladora. Que lo sea no quiere decir que vaya por ahí contando las cosas que a mí me cuentan, ni mucho menos. Porque como dijo Plutarco, para saber hablar es preciso saber escuchar.
Pues en una de esas geniales conversaciones que ahora tengo por whatsapp con mi amiga Patri, la Gominola, anoche, le dije que la entrada de hoy iba a ir de otra cosa que a mí me parece importante en la vida: compartir. Porque para mí la vida es compartir. Compartir conversaciones, compartir un café, compartir momentos, compartir lágrimas y sonrisas,...
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Sin embargo, muchas veces leo en internet, escucho en el trabajo y oigo en el metro que a la gente no hay que enseñarles las cosas que tú sabes. Pongo un ejemplo, uno laboral. Cuando uno adquiere experiencia, va adquiriendo a su vez conocimientos. Al menos en mi trabajo es fundamental eso de seguir aprendiendo cada día. Y hay alguna gente a la que le cuesta compartir esos conocimientos. Que piensa que si comparte esos conocimientos pierde relevancia, porque entonces ya hay otra persona que ya sabe lo mismo. Y entonces no puede poner en valor su conocimiento.
De todas maneras, en internet se puede encontrar de todo, o al menos, casi de todo. Ya sé que eso tiene sus pros y sus contras, que se lo digan a los autores. Aunque no estoy de acuerdo conque la culpa de la falta de asistentes al cine la tenga sólo la descarga de películas en internet (aunque eso es un tema aparte). Creo que internet es un sitio estupendo para compartir conocimientos, para compartir experiencias, para conocer gente,... A mí me chiflan los blogs donde puedo encontrar tutoriales, pero también me encantan los blogs donde me explican experiencias personales, donde hablan sobre viajes desde una experiencia propia, donde te dan recetas explicándotelo como si estuvieran a tu lado,...
De hecho, yo he hecho de mi blog el sitio donde pongo en práctica esto de vivir es compartir. Y comparto mi vida. Y cuento las cosas que me pasan, reflexiono sobre lo que me ocurre y vivo lo que pienso.
¿Y tú, compartes tu vida?
Yo opino como tu!!! aunque, a veces soy egoista, lo reconozco y no comparto. Muchas veces se aprovechan de una, ya me entiendes y cada vez soy más hermética....
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